Pasar por un divorcio o una separación rara vez es un proceso sencillo: incluso en los casos en que no existe conflicto y en que ambas partes están de acuerdo con la decisión, toca hacer frente a un importante cambio de vida y al fracaso de un proyecto en común ‘para toda la vida’.
Ni qué decir tiene que la situación será presumiblemente mucho peor cuantos más conflictos existan en la pareja: desacuerdo acerca de la decisión de separarse, infidelidades (también financieras), situaciones de violencia verbal o incluso física…
Además, si tenemos hijos en común, este proceso deberá desarrollarse, si cabe, de forma aún más exquisita, teniendo muy en cuenta lo difícil que puede resultar para los niños ver cómo su núcleo familiar se desintegra.
Por eso es importante rodearnos de profesionales que nos ayuden a pasar por este mal trago de la forma más sana posible, evitando así almacenar un mal recuerdo o, al menos, guardar esta etapa en nuestra memoria como un proceso de cambio profundo en camino hacia una vida mejor.
Y es que si una realidad está clara es que, si se produce un divorcio, es porque éste es inevitable y, en general, la alternativa de mantenerse en pareja os hará más infelices a la larga. Muchas veces es necesario abandonar aquello que nos daña o nos impide crecer para dejar espacio a todo lo que está por venir. Y es en este contexto en el que entra en juego la figura del coach de divorcios, un profesional que trabaja específicamente con personas (o parejas) que pasan por una ruptura sentimental.
En este post respondemos a algunas de las dudas más frecuentes en torno a esta figura que resulta algo novedosa en España pero que ya funciona de forma regular en los países anglosajones, entre otros.
¿Qué es el coach de divorcios?
El coach de divorcios es una figura que se encuentra ampliamente implantada en Estados Unidos y de la que cada vez se habla más en España. Se trata de un perfil profesional encargado de ayudarte a pasar por tu ruptura de la forma más sana posible: entre otras cosas, te echarán una mano de cara a ordenar tus emociones y canalizarlas de forma correcta, aportando un enfoque constructivo y positivo a tu situación de cambio vital.
Un buen coach de divorcios tendrá conocimientos variados, ya que un divorcio, como ocurre con casi cualquier situación vital importante, no puede compartimentarse en disciplinas: es necesario que conozca el proceso legal que atravesarás, pero también contar con importantes nociones de psicología, conocer las implicaciones prácticas y económicas de una ruptura… aportando soluciones que te ayuden a abordarla sin arrastrar traumas.
Además, un coach de divorcios puede y debe impulsar el trabajo colaborativo entre todos los profesionales implicados en tu ruptura, especialmente tus abogados. También los hay especializados en explicar el proceso a los menores. En general, lo ideal sería que la familia al completo trabaje con este tipo de profesional, y no solo una de las partes, y que, a su vez, vuestro coach de divorcios trabaje conjuntamente con vuestro abogado, algo que en nuestro despacho podemos ofreceros.
De esta forma, igual que obtuvimos consejo y guía externa para planear nuestra boda, es posible contar con apoyo externo para ‘deshacer lo atado’ de forma sencilla, sin estigmas ni dramas innecesarios. El objetivo es construir un ‘decoupling’ o ‘desacoplamiento’ saludable.
Para que te hagas una idea aproximada, con un coach de divorcios puedes acceder a estrategias de afrontamiento para superar tu ruptura y rehacer tu vida, aprender a controlar tus finanzas de forma individual, aprender a manejar conflictos de la forma más pacífica y saludable posible, distribuir tu tiempo en función del régimen de custodia que decidáis, asumir tu nueva condición de soltero o soltera… La lista de soluciones y herramientas es muy variada, casi tanto como las necesidades a las que cada uno de nosotros se enfrenta en estos casos.
¿Qué formación tiene un coach de divorcios?
No existen requisitos específicos pero la formación de los coach de divorcios suele estar relacionada con la psicología y/o con la abogacía. Dado que se trata de un trabajo meramente humano, un requisito general entre quienes se dedican a ello es contar con una gran empatía y una gran capacidad para identificar las emociones y necesidades ajenas, aportando luz a su proceso donde, debido a la oscuridad que genera una ruptura, resulta complicado ver con claridad.
También debe existir un enfoque práctico y un arsenal de ideas y posibles soluciones que funcionen para los miembros de la pareja y para los niños. La experiencia acumulada les ayudará a identificar necesidades y futuros conflictos, anticipándose a ello y ofreciendo alternativas que permitan la máxima felicidad para todos.
¿Cómo ayuda un asesor de divorcios?
Un asesor de divorcios puede ayudarte de múltiples maneras y en distintos tipos de ruptura:
- Si no quieres romper la relación y tu pareja sí, es probable que te toque la parte más dura: asumir una vida por separado que no deseas y lidiar con toda una batería de sentimientos que pueden generar un enorme sufrimiento. Un coach de divorcios te ayudará a pasar por ello de la mejor forma posible: con rapidez y evitando que los conflictos se enquisten. Cuanto antes transites por este inevitable camino, antes podrás rehacer tu vida y, para lograrlo, un poco de ayuda externa puede ser el empujón necesario.
- Si ambos queréis romper la relación pero no os ponéis de acuerdo y te encuentras ante un divorcio contencioso. Esto significa que no existe acuerdo acerca de las medidas relacionadas con la separación o el divorcio. Sin la necesaria ayuda externa (además de la de tu abogado o abogada), estos conflictos podrían prolongarse y hacerse cada vez más grandes. No solo se trata del poder de negociación de tus abogados, sino de que seas capaz de ceder lo suficiente, asumir algunas pequeñas pérdidas o ajustes con respecto a tu escenario ideal y pensar en que, cuanto antes termine todo (y cuanto más justo sea el acuerdo alcanzado), antes seréis libres para comenzar de cero. Para ello es importante aprender a aproximar posturas y evitar dar por hecho que la tuya es la más adecuada: empatía, paciencia y apertura mental son algunas herramientas que utilizarás de la mano de tu coach de divorcios.
- Si tenéis hijos en común, sin duda será especialmente recomendable trabajar junto con un coach de divorcios. También si vuestra familia está formada por hijos fruto de parejas previas y, en general, siempre que existan personas en pleno desarrollo que puedan verse influenciadas por vuestras decisiones actuales… y por la forma en que os tratéis. Lograr un clima de respeto y de calma no siempre es fácil en estas circunstancias, pero existen herramientas para lograrlo. Sobre todo, es importante que puedas sentirte orgullosa de tu paso por la ruptura y que, al mirar atrás, no te arrepientas de ninguna reacción o de alguna que otra mala palabra que constituya un mal ejemplo para ellos. Incluso aunque el conflicto entre vosotros sea pequeño o incluso nulo, no pierdas de vista la importancia de contar con el apoyo necesario para asegurarte de que, efectivamente, ambos estáis haciendo las cosas bien desde el punto de vista del desarrollo de los niños.
- Si el divorcio o la separación ya existe pero es necesario modificar el convenio o dar nuevos pasos en la ruptura. En estos casos, toca volver a sentarse a negociar y puede que no quieras hacer las cosas como la vez anterior: por eso es frecuente que algunas personas acudan a un coach de divorcios para lograr trabajar de forma más amable con su expareja en esta ocasión, limando asperezas en el proceso, y afianzando y acomodando la ruptura a las necesidades de todas las personas implicadas.
Coach de divorcios y empoderamiento femenino
No es ningún secreto que, al menos por ahora, las mujeres dan forma al colectivo que más sacrificios profesionales (y, en definitiva, económicos y personales) lleva a cabo en un matrimonio cuando existen hijos, e incluso cuando no existen.
La implicación emocional en la familia atraviesa habitualmente todas las facetas de desarrollo de sus vidas, y el hecho de poner el cuidado del núcleo familiar siempre por delante implica un gran número de pequeños y grandes sacrificios que, al acumularse, pueden terminar por absorberla por completo.
Afortunadamente, poco a poco la situación se mueve hacia un mayor equilibrio que permite, entre otras cosas, que una eventual ruptura no resulte tan devastadora para la mujer.
Sin embargo, actualmente aún son muchas las ex esposas que sienten que, al divorciarse, el sentido de sus vidas se encuentra perdido: muchas han sacrificado gran parte de su vida social, personal y profesional, y se sienten desamparadas ante este nuevo escenario.
Por eso el coaching de divorcios suele ser especialmente utilizado por el colectivo femenino, y no es casualidad que así sea: un acompañamiento a la mujer que la ayude a impulsar su carrera y sus sueños es básico para encontrar esa felicidad que solo emana de la autorrealización y del propio liderazgo.
La clave en estos casos es favorecer el empoderamiento y ofrecer herramientas de crecimiento personal que ayuden a cada una de nosotras a encontrar su sitio y a dar a sus cualidades y metas el valor que se merecen. Si a ello le sumamos el trabajo de un buen abogado o abogada de Familia que enfoque las cosas desde la misma perspectiva y que ayude a la mujer a contar con los recursos que merece, la combinación será sin duda ganadora.
¿Puedo trabajar con un abogado y un coach de divorcios?
¡Claro que sí! De hecho, es lo más recomendable y en nuestro despacho contamos con la colaboración de Nadege Fayard, una de las principales profesionales del coaching de divorcios en España. También estamos abiertos a trabajar conjuntamente con cualquier profesional de tu confianza, por ejemplo, procedente del mundo de la psicología.
Tenemos una amplia experiencia en este ámbito y nos caracterizamos por tratar cada caso de forma muy personal, poniéndonos en tu piel e intentando acompañarte de la forma más cercana posible. Nuestra experiencia nos dice que es el mejor modo de conseguir mejores resultados para ti, para tu pareja y para tus hijos.
No se trata de que ganes tú: se trata de que ganéis todos y, para ello, las soluciones de compromiso son siempre las más duraderas y las que menos rencillas a futuro generan.
Coach de divorcios y mediación familiar: una combinación ganadora
Si estás a punto de atravesar una separación o un divorcio, nuestra recomendación es clara: la combinación perfecta para que este cambio de vida sea lo menos traumático y lo más enriquecedor y positivo posible es apoyarte tanto en un coach de divorcios como en el trabajo de un abogado o abogada de Familia que actúe como mediador.
Nuestra experiencia nos deja claro que evitar la vía judicial es clave para un futuro más saludable en la pareja y en la relación entre hijos y progenitores. En este ámbito, la mediación consigue evitar en gran medida el coste emocional (y económico) que trae de la mano un divorcio contencioso, es decir, aquel en el que no existe acuerdo y cada una de las partes tiene su propia propuesta acerca de como se desarrollarán las cosas en adelante, una vez materializada la ruptura.
En este contexto, el mediador de familia actúa como figura neutral y objetiva para que las partes puedan alcanzar un acuerdo amistoso en beneficio de todas las personas implicadas, incluyendo, por supuesto, a los menores. Se trata de mitigar el dolor que supone una ruptura y poder establecer una relación cordial y lo más normal y cariñosa posible con la otra parte.
En caso de acudir a los tribunales, es bastante probable que ninguna de las partes quede plenamente satisfecha, ya que dejaremos la decisión final a un juez. El resultado es una mayor probabilidad que el conflicto se perpetúe en el futuro, con el perjuicio que supone tanto para los miembros de la pareja como para los hijos.
Al contrario, con la mediación no hay ganadores ni perdedores; la polaridad del conflicto se resuelve en un clima de cooperación parental mediante la búsqueda de soluciones armónicas en beneficio de todos los que se ven afectados por ellas.
En definitiva, no lo dudes: evitar los tribunales es siempre la mejor opción. En nuestro despacho mantenemos la premisa de que nunca es tarde para alcanzar un acuerdo, ni siquiera a las puertas del juzgado, y usamos todas las herramientas a nuestro alcance para trabajar en un punto y final amistoso y pacífico.
Si buscas un equipo multidisciplinar y cercano con el que afrontar tu separación o divorcio, ponte en contacto con nosotras: estaremos encantadas de ayudarte.